LA HISTORIA NO TERMINA AQUI
Jafar Panahi es un director iraní condenado a 6 años de prisión y a 20 años de restricción, en los que no podrá filmar, dirigir o escribir películas, así como viajar al exterior o brindar entrevistas. La razón a todo esto, se basa en las temáticas desarrolladas en cada una de sus producciones, las cuales, al pertenecer a la oposición, supuestamente faltan el respeto a las ideas del país. Esta cuestión es fundamental tenerla presente para ver "This is not a Film", ya que, si bien algo se explica, es el sentido y el alma de la película.
La cinta carece de una historia o narración, es un documental que parece improvisado, en el que el director en primera persona se filma llevando adelante diferentes tareas rutinarias, hablando con sus abogados por teléfono sobre las situaciones legales que lo involucran y, lo más interesante de la propuesta, explicando su cine, analizando algunas escenas de sus películas y actuando, leyendo y representando el guión de un film que por situaciones legales no le permitieron llevar adelante. La película lleva ese intrigante título, primero porque todo lo filmado, según lo que él y el camarógrafo dicen, no tiene la intención de transformarse en un film, y segundo, porque remite a un juego de palabras que hace referencia a la problemática situación del director.
El relato aporta, además de los sentimientos y la indiferencia del director ante todo lo que le sucede, una clase de realización de cine muy interesante, en la que él hace todo lo posible para que el espectador logre captar el sentido de su inconclusa película, sin actores, escenarios, ni movimientos de cámaras.
Es así, como la película se convierte en un anexo a la realidad que pierde un poco de sentido, coherencia y fuerza por sí sola, ya que responde a la situación política del director, quien abre muchas preguntas que nunca tienen respuesta, dejándolas a la libre interpretación del espectador.
"This is not a Film", pese a no querer serlo, es una película, la cual profundiza y aporta la mirada en primera persona sobre la vida de Jafar Panahi. Un relato con momentos muy interesantes, que son imposibles de poder desgarrarlos de la realidad. Para conocer un poco la intimidad del director, su entorno, trabajo y secretos. Un documento histórico polémico y diferente.
La cinta carece de una historia o narración, es un documental que parece improvisado, en el que el director en primera persona se filma llevando adelante diferentes tareas rutinarias, hablando con sus abogados por teléfono sobre las situaciones legales que lo involucran y, lo más interesante de la propuesta, explicando su cine, analizando algunas escenas de sus películas y actuando, leyendo y representando el guión de un film que por situaciones legales no le permitieron llevar adelante. La película lleva ese intrigante título, primero porque todo lo filmado, según lo que él y el camarógrafo dicen, no tiene la intención de transformarse en un film, y segundo, porque remite a un juego de palabras que hace referencia a la problemática situación del director.
El relato aporta, además de los sentimientos y la indiferencia del director ante todo lo que le sucede, una clase de realización de cine muy interesante, en la que él hace todo lo posible para que el espectador logre captar el sentido de su inconclusa película, sin actores, escenarios, ni movimientos de cámaras.
Es así, como la película se convierte en un anexo a la realidad que pierde un poco de sentido, coherencia y fuerza por sí sola, ya que responde a la situación política del director, quien abre muchas preguntas que nunca tienen respuesta, dejándolas a la libre interpretación del espectador.
"This is not a Film", pese a no querer serlo, es una película, la cual profundiza y aporta la mirada en primera persona sobre la vida de Jafar Panahi. Un relato con momentos muy interesantes, que son imposibles de poder desgarrarlos de la realidad. Para conocer un poco la intimidad del director, su entorno, trabajo y secretos. Un documento histórico polémico y diferente.
7/10 BUENA
