TITULO ORIGINAL: A Christmas Story
ORIGEN: Estados Unidos
INTERPRETES: Peter Billingsley, Darren McGavin, Melinda Dillon
DIRECTOR: Bob Clark
FOTOGRAFIA: Reginald H. Morris
GUION: Jean Shepherd, Leigh Brown Bob Clark
MUSICA: Carl Zittrer, Paul Zaza
GENERO: Comedia
DURACION: 93 Minutos
CALIFICACION: Apta para todo público
DISTRIBUIDORA: Metro-Goldwyn-Mayer
ORIGEN: Estados Unidos
INTERPRETES: Peter Billingsley, Darren McGavin, Melinda Dillon
DIRECTOR: Bob Clark
FOTOGRAFIA: Reginald H. Morris
GUION: Jean Shepherd, Leigh Brown Bob Clark
MUSICA: Carl Zittrer, Paul Zaza
GENERO: Comedia
DURACION: 93 Minutos
CALIFICACION: Apta para todo público
DISTRIBUIDORA: Metro-Goldwyn-Mayer
MI OPINION:
8/10 MUY BUENA
CRITICA:
EL REGALO PROMETIDO
Por Martín Morales
Por Martín Morales
Si hay clásicos en la historia del cine navideño, "A Christmas Story" es uno de ellos. No solo por ser diferente y desarrollar una historia con un protagonista muy adorable, sino por marcar un quiebre en la manera de contar una historia de este estilo, presentar actuaciones que se destacan en todo minuto y un mensaje final muy tierno y reflexivo.
Ralphie es un niño de nueve años que quiere que para navidad le regalen la escopeta que usa su ídolo. Todos los mayores le ponen un freno a su ansiedad diciéndole que es un juguete peligroso y que se puede lastimar un ojo. Él poco los escucha y va a hacer todo lo posible por conseguir su regalo.
Una de las características más destacables de esta película comienza a desarrollarse desde la primer escena: una voz narradora relata la historia en primera persona, dando la sensación de que es el protagonista ya mayor que recuerda la anécdota de cómo recibió su mejor regalo. Esta cuestión le aporta mucha originalidad y una versatilidad muy buena a la cinta, ya que dicha voz interrumpe en muchas oportunidades el relato para dar acotaciones, algunas muy graciosas y otras que dejarán pensando al espectador. Esta marcada diferencia argumentativa se mantiene durante todo el desarrollo de la historia. El relato es sencillo, tan solo se cuentan las aventuras del niño al tratar de convencer a sus padres de que le compren ese jueguete, pero desarrolla muchos matices narrativos y una homogeneidad escénica muy bien lograda.
A su vez, el trabajo actoral realizado por todo el elenco ayuda a que las emociones y las reacciones del pequeño protagonista se intensifiquen y movilicen al espectador. Todos tienen su momento de lucimiento y logran destacarse aportándoles una característica física o actitudinal que, mientras los minutos van pasando, los van personificando. Es así como Peter Billingsley, Ralphie, logra crear un personaje muy querible y con una ternura deliciosa, sus pequeñas expresiones y esos locos momentos en los que su personaje encarna los diferentes pensamientos, están excelentes actoralmente. Darren McGavin, el padre, tiene el personaje más divertido de la película, un hombre que lucha con su trabajo y que está obsesionado con un peculiar regalo. Melinda Dillon, la madre, se destaca principalmente cuando defiende a su hijo. Todos están muy correctos.
Esta es una historia contada de manera distinta, con los toques de comedia necesarios como para que se transforme en una disfrutable cinta navideña, pero también con un mensaje o moraleja final que está perfectamente desarrollada y que intensifica todo el planteo argumental de la película. Se pueden apreciar unos momentos, indudablemente los mejores de la historia, en los que se puede ver una representación viva del subconsciente del pequeño protagonista. Todos ellos están perfectos y, además de estar muy bien dirigidos, actuados y guionados, son muy divertidos y presentan un estilo visual diferente al desarrollado en la cronología real de la historia.
La fotografía es acorde a las necesidades del guión, hay unas cuantas escenas en las que predominan las cámaras subjetivas y los planos generales. Hay mucho plano detalle en las expresiones del protagonista, al igual que en algunos objetos. Hay un uso excesivo de las repeticiones en las transiciones para demostrar el paso del tiempo, se utiliza mucho la corrida en cámara rápida en reiteradas oportunidades. La música acompaña muy bien el relato, aportando siempre la típica tonada festiva y navideña necesaria.
"A Christmas Story" es una cinta muy divertida, bien actuada, dirigida y guionada, que desarrolla un final muy efectivo, reflexivo y entretenido. Una muy bien lograda película, con un estilo muy marcado y original, ambientada en la navidad que vale la pena volver a ver, disfrutar y recordar.
UNA ESCENA A DESTACAR: el encuentro con Santa Claus
Ralphie es un niño de nueve años que quiere que para navidad le regalen la escopeta que usa su ídolo. Todos los mayores le ponen un freno a su ansiedad diciéndole que es un juguete peligroso y que se puede lastimar un ojo. Él poco los escucha y va a hacer todo lo posible por conseguir su regalo.
Una de las características más destacables de esta película comienza a desarrollarse desde la primer escena: una voz narradora relata la historia en primera persona, dando la sensación de que es el protagonista ya mayor que recuerda la anécdota de cómo recibió su mejor regalo. Esta cuestión le aporta mucha originalidad y una versatilidad muy buena a la cinta, ya que dicha voz interrumpe en muchas oportunidades el relato para dar acotaciones, algunas muy graciosas y otras que dejarán pensando al espectador. Esta marcada diferencia argumentativa se mantiene durante todo el desarrollo de la historia. El relato es sencillo, tan solo se cuentan las aventuras del niño al tratar de convencer a sus padres de que le compren ese jueguete, pero desarrolla muchos matices narrativos y una homogeneidad escénica muy bien lograda.
A su vez, el trabajo actoral realizado por todo el elenco ayuda a que las emociones y las reacciones del pequeño protagonista se intensifiquen y movilicen al espectador. Todos tienen su momento de lucimiento y logran destacarse aportándoles una característica física o actitudinal que, mientras los minutos van pasando, los van personificando. Es así como Peter Billingsley, Ralphie, logra crear un personaje muy querible y con una ternura deliciosa, sus pequeñas expresiones y esos locos momentos en los que su personaje encarna los diferentes pensamientos, están excelentes actoralmente. Darren McGavin, el padre, tiene el personaje más divertido de la película, un hombre que lucha con su trabajo y que está obsesionado con un peculiar regalo. Melinda Dillon, la madre, se destaca principalmente cuando defiende a su hijo. Todos están muy correctos.
Esta es una historia contada de manera distinta, con los toques de comedia necesarios como para que se transforme en una disfrutable cinta navideña, pero también con un mensaje o moraleja final que está perfectamente desarrollada y que intensifica todo el planteo argumental de la película. Se pueden apreciar unos momentos, indudablemente los mejores de la historia, en los que se puede ver una representación viva del subconsciente del pequeño protagonista. Todos ellos están perfectos y, además de estar muy bien dirigidos, actuados y guionados, son muy divertidos y presentan un estilo visual diferente al desarrollado en la cronología real de la historia.
La fotografía es acorde a las necesidades del guión, hay unas cuantas escenas en las que predominan las cámaras subjetivas y los planos generales. Hay mucho plano detalle en las expresiones del protagonista, al igual que en algunos objetos. Hay un uso excesivo de las repeticiones en las transiciones para demostrar el paso del tiempo, se utiliza mucho la corrida en cámara rápida en reiteradas oportunidades. La música acompaña muy bien el relato, aportando siempre la típica tonada festiva y navideña necesaria.
"A Christmas Story" es una cinta muy divertida, bien actuada, dirigida y guionada, que desarrolla un final muy efectivo, reflexivo y entretenido. Una muy bien lograda película, con un estilo muy marcado y original, ambientada en la navidad que vale la pena volver a ver, disfrutar y recordar.
UNA ESCENA A DESTACAR: el encuentro con Santa Claus