TITULO ORIGINAL: Gremlins
ORIGEN: Estados Unidos
INTERPRETES: Hoyt Axton, Zach Galligan, Phoebe Cates, Frances Lee McCain, Corey Feldman
DIRECTOR: Joe Dante
FOTOGRAFIA: John Hora
GUION: Chris Columbus
MUSICA: Jerry Goldsmith
GENERO: Comedia
DURACION: 106 Minutos
CALIFICACION: Apta para mayores de 13 años
DISTRIBUIDORA: Warner Bros
ORIGEN: Estados Unidos
INTERPRETES: Hoyt Axton, Zach Galligan, Phoebe Cates, Frances Lee McCain, Corey Feldman
DIRECTOR: Joe Dante
FOTOGRAFIA: John Hora
GUION: Chris Columbus
MUSICA: Jerry Goldsmith
GENERO: Comedia
DURACION: 106 Minutos
CALIFICACION: Apta para mayores de 13 años
DISTRIBUIDORA: Warner Bros
MI OPINION:
8/10 MUY BUENA
CRITICA:
NO LES DES DE COMER DESPUES DE LA MEDIANOCHE
Por Martín Morales
Por Martín Morales
Divertida comedia con toques de suspenso y terror que parodia con éxito y determinación muchos de los éxitos cinematográficos de la década en la que se estrenó, que triunfa gracias a una original y clara idea argumental y un diseño artístico muy bien logrado a lo que respecta a los pequeños y tenebrosos villanos.
Para navidad Billy recibe un extraño regalo de su padre: un cofre con un extraño animal dentro. Lo que él sabe es que no lo tiene que mojar, no acercar a luces brillantes ni darle de comer pasada la medianoche, tres reglas que poco a poco va a ir desobedeciendo. Es así como le da vida a un grupo de criaturas salvajes dispuestas a matar y reírse de toda la ciudad.
El planteo inicial de la cinta, con una voz narradora por parte del padre del protagonista, es muy llamativo e introduce, aunque lo hace con realismo y firmeza, una fantasía que comienza a intensificarse mientras los minutos van pasando. El primer encuentro con el tierno animal, en un negocio lleno de artilugios "mágicos" y extraños en Chinatown, es un simple pero muy efectivo cliché que el género se permitió implementar y que aquí se parodia muy bien. En estos primeros minutos también se presentan dos personajes, que van cobrando mucha importancia, que tienen una intención muy clara y que aportan calidad y mucho disfrute a la película: por un lado la señora mayor dispuesta a matar al perro del protagonista y por otro lado el hombre alcohólico y muy nacionalista, que predice, en cierta manera, el futuro.
Luego, una vez desarrollada la identidad de la pequeña criatura, de sus dotes con la música y de su amistosa relación con Billy, se plantea el principal conflicto de la cinta, que se produce al no respetar una de las tres reglas, y donde aparece el principal quiebre argumental de la película. Todo lo desarrollado hasta este momento está muy cuidado y el rumbo que la historia va tomando va planteando una fantasía muy bien nivelada con el realismo y la presentación de los personajes. Luego de este quiebre, la narración comienza a explorar otros terrenos y es allí donde "Gremlins" triunfa.
La película no se priva de mostrar todo lo que quiere. Se crea un suspenso muy bien logrado con la figura demoníaca de cada criatura, en especial luego de la eclosión de los capullos y esas escenas en la cocina y en el colegio. Se van creando momentos de delirio absoluto, en los que se puede ver a los gremlins personificando a todos los estereotipos imaginables del cine y de la sociedad, parodiando no solo a las películas a las que hace referencia, sino también a los hábitos humanos. Los momentos en la sala del cine y en el bar son únicos y están perfectamente logrados.
A su vez, todo el desarrollo final, o sea las escenas dentro del centro comercial, tienen una marca excelente que hace referencia a todos los lugares comunes que el terror entra y no sabe como salir. Esos pocos minutos son excelentes y desarrollan un humor muy bien logrado y una locura muy sobreactuada pero perfecta teniendo en cuenta el sentido y la intención con la que fueron filmadas.
Las actuaciones son correctas. Hoyt Axton es aquí un inventor que no hace nada bien y que llena su casa con aparatos que explotan solos y que no sirven, muy bien interpretado; Zach Galligan, el protagonista, expresivo cuando el guión lo requiere y destacable en muchas reacciones y momentos y Phoebe Cates, en sus pocos momentos, está correcta.
"Gremlins" es una película que se destaca y se disfruta gracias a su intención de parodiar al terror y a sus propios clichés. Una cinta muy bien lograda desde lo visual, con efectos especiales, muy creíbles y realistas. Un film que presenta una melodía que quedará para la historia y una banda musical que capta el estilo y el sentido de la historia. Una comedia con toques de suspenso muy recomendable.
UNA ESCENA A DESTACAR: bar
Para navidad Billy recibe un extraño regalo de su padre: un cofre con un extraño animal dentro. Lo que él sabe es que no lo tiene que mojar, no acercar a luces brillantes ni darle de comer pasada la medianoche, tres reglas que poco a poco va a ir desobedeciendo. Es así como le da vida a un grupo de criaturas salvajes dispuestas a matar y reírse de toda la ciudad.
El planteo inicial de la cinta, con una voz narradora por parte del padre del protagonista, es muy llamativo e introduce, aunque lo hace con realismo y firmeza, una fantasía que comienza a intensificarse mientras los minutos van pasando. El primer encuentro con el tierno animal, en un negocio lleno de artilugios "mágicos" y extraños en Chinatown, es un simple pero muy efectivo cliché que el género se permitió implementar y que aquí se parodia muy bien. En estos primeros minutos también se presentan dos personajes, que van cobrando mucha importancia, que tienen una intención muy clara y que aportan calidad y mucho disfrute a la película: por un lado la señora mayor dispuesta a matar al perro del protagonista y por otro lado el hombre alcohólico y muy nacionalista, que predice, en cierta manera, el futuro.
Luego, una vez desarrollada la identidad de la pequeña criatura, de sus dotes con la música y de su amistosa relación con Billy, se plantea el principal conflicto de la cinta, que se produce al no respetar una de las tres reglas, y donde aparece el principal quiebre argumental de la película. Todo lo desarrollado hasta este momento está muy cuidado y el rumbo que la historia va tomando va planteando una fantasía muy bien nivelada con el realismo y la presentación de los personajes. Luego de este quiebre, la narración comienza a explorar otros terrenos y es allí donde "Gremlins" triunfa.
La película no se priva de mostrar todo lo que quiere. Se crea un suspenso muy bien logrado con la figura demoníaca de cada criatura, en especial luego de la eclosión de los capullos y esas escenas en la cocina y en el colegio. Se van creando momentos de delirio absoluto, en los que se puede ver a los gremlins personificando a todos los estereotipos imaginables del cine y de la sociedad, parodiando no solo a las películas a las que hace referencia, sino también a los hábitos humanos. Los momentos en la sala del cine y en el bar son únicos y están perfectamente logrados.
A su vez, todo el desarrollo final, o sea las escenas dentro del centro comercial, tienen una marca excelente que hace referencia a todos los lugares comunes que el terror entra y no sabe como salir. Esos pocos minutos son excelentes y desarrollan un humor muy bien logrado y una locura muy sobreactuada pero perfecta teniendo en cuenta el sentido y la intención con la que fueron filmadas.
Las actuaciones son correctas. Hoyt Axton es aquí un inventor que no hace nada bien y que llena su casa con aparatos que explotan solos y que no sirven, muy bien interpretado; Zach Galligan, el protagonista, expresivo cuando el guión lo requiere y destacable en muchas reacciones y momentos y Phoebe Cates, en sus pocos momentos, está correcta.
"Gremlins" es una película que se destaca y se disfruta gracias a su intención de parodiar al terror y a sus propios clichés. Una cinta muy bien lograda desde lo visual, con efectos especiales, muy creíbles y realistas. Un film que presenta una melodía que quedará para la historia y una banda musical que capta el estilo y el sentido de la historia. Una comedia con toques de suspenso muy recomendable.
UNA ESCENA A DESTACAR: bar
