JOHANSSON Y CHOI SE SALUDAN
Por Martín Morales
Por Martín Morales
Luego de algunas comedias algo desanimadas y películas de animación sin mucho éxito, Luc Besson ("El Quinto Elemento") vuelve a lo que en su momento lo hizo grande: la acción. "Lucy" es una propuesta con mucha energía, con una filosofía que no hay que tomarla muy en serio, y con un encanto por parte de Scarlett Johansson que es la base y el sostén de todo el metraje.
Lucy es una mujer de 25 años que está estudiando en Taipei, Taiwan. Un día su pareja la obliga a llevarle un maletín al líder de un grupo narcotraficante. Al descubrir qué era lo que había en el mismo, es sometida a convertirse en una mula. Después de unas horas, la bolsa plástica dentro de su estómago se rompe y la droga comienza a dispersarse por su cuerpo, abriéndole partes del cerebro que nunca antes el ser humano tuvo la oportunidad de explorar.
Lucy es una mujer de 25 años que está estudiando en Taipei, Taiwan. Un día su pareja la obliga a llevarle un maletín al líder de un grupo narcotraficante. Al descubrir qué era lo que había en el mismo, es sometida a convertirse en una mula. Después de unas horas, la bolsa plástica dentro de su estómago se rompe y la droga comienza a dispersarse por su cuerpo, abriéndole partes del cerebro que nunca antes el ser humano tuvo la oportunidad de explorar.
La historia viaja por planteos científicos y filosóficos que con rapidez se pierden en el relato y funcionan como un efecto más dentro de la propuesta. No es un film para pensar ni que deje al espectador con alguna idea que le cambie la manera de ver las cosas, es como si Besson hubiese visto demasiadas veces "The Matrix" y decidió realizar su punto de vista sobre la creación, la inteligencia y el control, pero sin demasiada profundidad ni seriedad. Es puro entretenimiento y eso se valora.
El film se sostiene gracias a dos situaciones muy bien logradas: por un lado, el trabajo de Scarlett Johansson en el papel protagónico, y por otro, los varios momentos de asombro técnico y narrativo que el director lleva adelante. La actriz no solo se consagra aquí como una de las femme fatales más interesantes de las últimas décadas del cine de Holywood (algo que ya había demostrado con su personaje de la Viuda Negra en "Los Vengadores"), sino que vuelve a expresar sus convincentes dotes para la actuación. Aquí es una joya que Besson supo sacarle todo su brillo.
Dejando de lado el poder técnico que esta película tuvo en su producción, algo excesivo en los momentos finales, el director se las ingenió para desarrollar secuencias que remiten a aquellos grandes momentos de su filmografía. Una inspirada persecución por las calles de París; los muchos encuentros con los narcotraficantes, donde se la ve a la protagonista utilizar sus nuevos poderes; las muchas referencias en los primeros minutos a la vida animal; y esa crueldad perfectamente manejada en los tiroteos y en el villano, encarnado por un siempre impecable Min-sik Choi.
"Lucy" es una interesante y divertida propuesta. Con un relato que se pasa minutos dando discursos sin mucha profundidad, pero con un muy buen trabajo actoral y con algunas secuencias que recuerdan a los mejores años de Besson en la silla del director. No alcanza para ser una cinta redonda e inolvidable, pero sí para pasar un agradable y entretenido momento en la sala del cine.
6/10 BUENA
