TERRI

TITULO ORIGINAL: Terri (Terri)
ORIGEN: Estados Unidos (2011)
DIRECTOR: Azazel Jacobs
INTERPRETES: Jacob Wysocki, John C. Reilly, Bridger Zadina, Creed Bratton, Olivia Crocicchia
FOTOGRAFIA: Tobias Datum
MUSICA: Mandy Hoffman
GUION: Patrick deWitt
GENERO: Drama
DURACION: 105 Minutos
DISTRIBUIDORA: Verisimilitude, Silverwood Films, KnowMore Productions

MI OPINION:

6/10 BUENA

CRITICA:

EN BUSCA DE CARIÑO
Por Martín Morales

Cinta que desarrolla un sencillo, pero a la vez complicado, planteo sobre la vida durante la adolescencia que, con un excelente trabajo actoral por parte de cada uno de los intérpretes, con una acertada dirección y un guión que explora las diferentes relaciones del protagonista (a veces muy bien, y otras con algo de dificultad), logra convertirse en una interesante propuesta, intensa por momentos e indefinida por otros.

Terri es un joven que vive con su tío, quien está enfermo y a quien tiene que cuidar con responsabilidad. Su vida es solitaria, no tiene amigos y en el colegio tiene que aguantar continuamente los insultos y burlas de los compañeros por su sobrepeso. Luego de faltar varias veces a clase y de llegar tarde, el director del establecimiento lo llama para tratar de averiguar qué es lo que le está sucediendo. Es así, como se comienza una relación fraternal entre ellos, mientras que el hombre va a tratar de ayudarlo a enfrentar su realidad.

La historia está centrada plenamente en el protagonista (son muy pocos los segundos que no está en escena) y en las diferentes relaciones que tiene con su entorno. Si bien la identidad solitaria, depresiva y luchadora que predomina en él está muy bien desarrollada, interpretada y escrita, son tres los planteos paralelos que la propuesta hace para que esas características cobren sentido y acompañen el muy buen trabajo realizado por Jacob Wysocki (Terri).

Por un lado, la relación entre Terri y el Señor Fitzgerald, el director del colegio. Sin duda alguna, estos son los mejores momentos de la propuesta, ya que se puede apreciar una evolución de su unión perfecta y maravillosa. El hombre pasa de ser con rapidez, pero nunca perdiendo la credibilidad y la profundidad, de un simple y enojado director a ser la única representación moral y paterna del protagonista. El guión que desarrolla estos momentos es muy acertado, se presentan varias escenas muy ricas y profundas (muerte de la secretaria) y se introducen varias situaciones de amor-odio que, con velocidad, resumen los vertiginosos sentimientos de Terri. A su vez, el trabajo realizado por John C. Reilly es muy bueno, ya que logra expresar con diferentes matices las distintas emociones de su papel. Lamentablemente, mientras los minutos van pasando este planteo se va dejando de lado y se va presentando otro que, si bien ayuda a entender al personaje y a describir a la juventud, carece de la profundidad y del sentido que la narración se merecía.

La relación entre Terri y sus dos "amigos". Aquí se desarrolla una cuestión que aparece en las dos situaciones que involucran a Chad y a Heather, los dos compañeros: el protagonista pasa de ser un muchacho tímido y vergonzoso a tener dos mejores amigos en tan solo minutos, provocando que su relación carezca del sentido y del realismo que la historia en todo momento intenta tocar. Hay una extendida secuencia en la que ellos tres pasan una noche alcoholizándose y drogándose, la cual distorsiona un poco el tema de la superación y la humillación que muy bien fue desarrollada en la primera parte. Queda claro el sentido que el director le quiso brindar a esas escenas, pero fueron llevadas adelante de una manera algo extremista y exagerada totalmente innecesaria. Cabe destacar el trabajo realizado por Bridger Zadina y Olivia Crocicchia, ls dos amigos.

Por último, la relación de Terri con su tío. Momentos algo indiferentes y que se alejan totalmente de los estereotipos del género. La enfermedad, el cuidado y la responsabilidad están muy bien desarrollados en esta parte de la historia e intensifican el sentido sobre la ausencia de una figura paterna para que la relación con el director pueda ser mucha más fuerte y humana. Muy buenos momentos y muy correcta la labor de Creed Bratton.

"Terri" es una propuesta que lejos está de ser una gran película, pero es lo sufcientemente satisfactoria y correcta como para que se merezca una recomendación. Una cinta muy bien actuada, con un planteo sobre las relaciones durante la adolescencia bien logrado y que, pese a los problemas en ciertas situaciones, desarrolla un drama profundo, interesante y auténtico. Los laureles se los lleva Jacob Wysocki, en el papel le da el título al film.

UNA ESCENA A DESTACAR: abrazo.