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THE CHANGE-UP



TITULO ORIGINAL: The Change-Up (Si Fueras Yo)
ORIGEN: Estados Unidos (2011)
DIRECTOR: David Dobkin
INTERPRETES: Ryan Reynolds, Jason Bateman
FOTOGRAFIA: Eric Alan Edwards
MUSICA: John Debney
GUION:
Jon Lucas, Scott Moore
GENERO: Comedia
DURACION: 112 Minutos
DISTRIBUIDORA: Universal Pictures
CALIFICACION: Apta para mayores de 16 años



MI OPINION:



4/10 REGULAR


























CRITICA:
CAMBIAR DE CUERPO PARA CAMBIAR LA MENTE
Por Martín Morales

No hace falta esperar más de cinco o seis minutos para descubrir que el humor aquí desarrollado no se aleja del presentado en gran parte de las películas de Hollywood de los últimos años, al mismo tiempo que el espectador se da cuenta de que no está presenciando una cinta que no entra en situaciones y en lugares trillados. Pese a que son muchos los momentos en los que se llama a la gracia fácil, a la previsibilidad y a la vulgaridad para demostrar algún sentimiento o emoción de los personajes, la propuesta va mejorando mientras los minutos van pasando, convirtiéndola en una entretenida, pero fallida, comedia.

Dave y Mitch son dos amigos que se conocen desde chicos y han compartido juntos todos los grandes momentos de sus vidas. El primero es un exitoso y reconocido abogado, casado y con tres hijos, mientras que el otro es un actor que tiene mucho tiempo libre, que le encanta tener relaciones casuales con mujeres, fumar y alcoholizarse. Ambos envidian sus presentes. Las vueltas de la vida y los caminos que cada uno decidió tomar los fueron alejando poco a poco. Una mañana, luego de una noche de borrachera juntos, se dan cuenta de que cada uno está en el cuerpo del otro. Tienen la oportunidad que siempre soñaron: vivir la vida de su mejor amigo. Rápidamente todo se vuelve un caos y lo que ellos pensaron que era divertido se convierte en un rompecabezas difícil de resolver.

La premisa de los cuerpos cambiados ha sido vista en muchas oportunidades y aquí no hay nada que se aleje de lo presentado en esas otras películas: confusión, enredos matrimoniales, desconciertos por parte de los conocidos de los protagonistas, problemas personales que aparecen sin querer, y la mirada de la realidad desde otro punto de vista que hace reflexionar sobre sus acciones y sirve como un libro de autoayuda para los personajes. La temática no es novedosa y el guión no invoca algo que logre diferenciarla del resto.

La historia da comienzo con una secuencia en la que se ejemplifica con rapidez el tipo de humor que la misma presentará durante su desarrollo: asquerosidades, malas palabras, chistes de mal gusto y vulgaridades. Esto aparece en casi la totalidad de la cinta y, aunque son pocos lo momentos donde se puede apreciar un humor interesante y un planteo emocional que apoye al argumento central, la película nunca pretende sorprender al espectador ni diferenciarse de filmes como "The Hangover" o "The Wedding Crashers" (la primera producida y la otra dirigida por los responsables de esta propuesta).

Cerca de la mitad de duración, la película comienza a dejar de lado el humor para centrarse en los sentimientos y en los cambios de actitud de los personajes, y es allí donde la propuesta logra lucirse. Las escenas dramáticas aquí expuestas están bien logradas, no solo en lo que respecta a lo técnico, sino que también fueron apoyadas por dos buenos trabajos actorales: Ryan Reynolds y Jason Bateman están correctos en sus papeles, en especial en las instancias finales de la historia.

"The Change-Up" es una película poco original, con un humor vulgar y poco divertido. Con un argumento que poco aporta al género y con una segunda mitad mucho mejor lograda, pero con escenas y actores desaprovechados (al comienzo), y una previsibilidad que siempre está presente. Una comedia muy correcta técnicamente, pero con un guión que no explora los matices dramáticos que la narración introduce.

UNA ESCENA A DESTACAR: los momentos finales.
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