TITULO ORIGINAL: The Broadway Melody
ORIGEN: Estados Unidos
INTERPRETES: Charles King, Anita Page, Bessie Love
DIRECTOR: Harry Beaumont
FOTOGRAFIA: John Arnold
MUSICA: Nacio Herb Brown, George M. Cohan, Willard Robison
GUION: Edmund Goulding, Norman Houston, James Gleason
GENERO: Musical
DURACION: 110 Minutos
CALIFICACION: Apta para mayores de 13 años
DISTRIBUIDORA: Metro-Goldwyn-Mayer
ORIGEN: Estados Unidos
INTERPRETES: Charles King, Anita Page, Bessie Love
DIRECTOR: Harry Beaumont
FOTOGRAFIA: John Arnold
MUSICA: Nacio Herb Brown, George M. Cohan, Willard Robison
GUION: Edmund Goulding, Norman Houston, James Gleason
GENERO: Musical
DURACION: 110 Minutos
CALIFICACION: Apta para mayores de 13 años
DISTRIBUIDORA: Metro-Goldwyn-Mayer
MI OPINION:
5/10 REGULAR
CRITICA:
EL COMIENZO DEL CINE SONORO Y SUS PROBLEMAS
Por Martín Morales
Por Martín Morales
Las películas de 1929 se caracterizaron por presentar una característica en común, que se ve bien clara si se tiene la oportunidad de apreciar las otras cuatro cintas nominadas a los Premios Oscars en la categoría "Mejor Película": todas fueron regulares, y, aunque estéticamente cada una de ellas mantuvo una calidad muy bien lograda y plasmaron alguna característica de la sociedad de la época, los guiones carecieron de interés, de atractivo y de sorpresas. Esto se debió a una simple cuestión, el cine mudo se estaba despidiendo y estaba llegando e instalándose el sonido como principal eje de la producción, ocasionando un pequeño desorden en la manera de hacer las películas. "The Broadway Melody", y pese a que ganó el premio de la Academia en dicho año, no se aleja de dichas irregularidades.
Dos hermanas deciden mudarse a Nueva York para probar suerte en los teatros de Broadway. Un músico, amigo de ellas, les va a conseguir un trabajo en un espectáculo de revista que promete tener mucho éxito. Luego de unos ensayos, una de las mujeres se va a destacar más, va a ser la protagonista de algunos números y va a ser seducida por un millonario dispuesto a regalarle todo lo que ella quiera. Su hermana, celosa, va a tratar de bajarla de la ilusión y llevarla de vuelta a la realidad.
Esta cinta, históricamente, es la primer película musical sonora de la historia de Hollywood. Son pocos los momentos musicales, pero los mismos están muy bien logrados y mantienen un estilo de tranquilidad y de poco deslumbramiento visual muy acorde a las obras de la época. La historia es muy sencilla y previsible, se sabe cómo las cosas se van a ir dando mientras los minutos van pasando y no se presentan sorpresas ni situaciones dramáticas para pensar, emocionarse o sentirse identificado con alguno de los personajes. Todo es simple, todo es muy alegre y todo desarrolla un espíritu de calidez y suerte bien logrado.
El guión tiene dos líneas argumentales, por un lado la laboral y por otro la sentimental. La primera es, sencillamente, lo mejor de la película. Cada uno de los momentos musicales, las puestas en escena, los bailes y las personificaciones arriba del escenario (en especial ese en el que se juegan con pelotas y hay un casamiento, cerca del final), son maravillosas y desarrollan un lucimiento y valor artístico muy rico. A su vez, los momentos detrás del espectáculo, en camarines y cada una de las situaciones que muestran las etapas de producción de la revista, muestran una realidad imposible de ver para el espectador de la época, muy interesantes.
Pero, y es allí donde aparece el principal problema, la película también va aderezada con una historia de amor y de éxito que no ayuda a profundizar los aciertos técnicos ni los momentos musicales. La historia de las hermanas, el amor entre ellas, la aparición del hombre que la quiere agasajar y el triángulo que se forma con la figura de Eddie, todo tiene una melosidad y una inverosimilitud muy artificial, utilizando muchos estereotipos de personalidades y llevando adelante clichés repetitivos y poco atrapantes. Es un melodrama previsible y carente de emoción, no se siente el amor ni el dolor de los personajes.
Las actuaciones son correctas. Charles King (se destaca cuando canta), Anita Page (muy bien al comienzo, cuando su timidez y nerviosismo le juega una mala pasada) y Bessie Love (la mejor interpretación, en el rol de la hermana acelerada y celosa) se destacan en ciertos momentos, pero cuando, cerca del final, sus roles necesitan expresar con profundidad los sentimientos, sobreactuan y no hacen creíbles las vueltas y resoluciones.
"The Broadway Melody" es una cinta que se destaca por el lado musical y en todo lo que tiene que ver con cada uno de los momentos de comedia y sobre el escenario del teatro, pero que su historia de amor y la previsibilidad le juega una mala pasada. Correctamente actuada, con un guión poco sorpresivo y que gira, en muchas oportunidades, sobre situaciones poco atractivas y que no llevan a ningún lado, esta es una película para tener en cuenta, pero que para nada refleja lo mejor de los comienzos del cine sonoro.
UNA ESCENA A DESTACAR: número teatral cerca del final.