ORIGEN: Estados Unidos.
INTERPRETES: Marilyn Burns, Paul A. Partain, Edwin Neal, Jim Siedow, Gunnar Hansen
DIRECTOR: Tobe Hooper
FOTOGRAFIA: Daniel Pearl
GUION: Kim Henkel, Tobe Hooper
MUSICA: Wayne Bell, Tobe Hooper
GENERO: Terror.
DURACION: 84 Minutos
CALIFICACION: Apta mayores de 16 años
DISTRIBUIDORA: Bryanston Distributing Company
ESTRENO: 1 de Octubrede 1974
MI OPINION:
9/10 MUY BUENA
CRITICA:
BIZARRA DEMOSTRACION DE CRUELDAD
Por Martín Morales
Por Martín Morales
Esta película desarrolla una historia en la que se plantea y se deja ver la brutalidad humana, y si el director no hubiese tomado las decisiones justas para que el relato no se convierta en un festín de muertes sin sentido y sin miedo, seguramente el resultado hubiese sido totalmente diferente. Pero, por suerte, Tobe Hooper logró crear una narración en la que cada segundo presenta una originalidad y una atmósfera de desesperación e incertidumbre perfecta, acompañándola de una serie de villanos escalofriantes, una herramienta de tortura muy bien implementada y un estilo narrativo documentado que intensifica la experiencia.
Un grupo de cinco personas deciden dirigirse hacia la casa abandonada de la familia en un pueblo desértico en Texas. Cuando llegan se van a encontrar con que ellos no están solos y que un maniático los está esperando para despedazarlos.
La historia se introduce con unas frases escritas y narradas por una voz en off que dan a entender que lo que se verá a continuación fue basado en una historia verídica, cuestión que por supuesto intensifica el disfrute y convierte al relato en una misteriosa travesía por la mente humana y sus crueles intenciones. Pero, esto no es lo que en realidad funciona como principal fuente de temor o de verosimilitud en la historia, sino la manera en la que se decidió llevar adelante cada una de las escenas. La narración está contada en forma de documental, dando fechas, nombres, lugares y testimonios de periodistas que supuestamente formaron parte de esos hechos reales, y es aquí donde la película triunfa, ya que en su conjunto lo real que minuto a minuto el film se va transformando es asombroso y escalofriante.
El villano, que hasta cierto punto hay una intención por presentarlo solo, abandonado y con una necesidad de matar pese a cual fuera la víctima, el famoso "Leatherface", está introducido de manera muy sorpresiva y rápida, asesinando desde su primer aparición hasta ese inconcluso final. Viste de camisa blanca arremangada, de aspecto vieja, rota y sucia, acompañada de una corbata oscura que con el paso del tiempo se fue manchando y endureciendo a causa de las sucesivas muertes. Por encima tiene un delantal color piel, en el que se pueden apreciar algunas manchas de sangre desparramadas, marca de su crueldad y violencia; es corpulento, fuerte e intimidante. Sus movimientos son bruscos, intensos y hará todo lo posible por alcanzar, despedazar y finalizar a su presa. Como arma utiliza una maza, con la que mata a las víctimas más indefensas y "fáciles", mientras que utiliza una motosierra para desmembrar a las intrépidas presas que salen corriendo en busca de la libertad. Esta es su marca personal, con ella troza a su víctimas y las guarda dentro de un refrigerador, con el propósito de que en un futuro pueda satisfacer el hambre y la soledad. Su rostro está cubierto por unas máscaras, realizadas con el cuero de las personas asesinadas, que va cambiando con el paso del tiempo. Sin duda alguna, cada uno de los momentos en los que este personaje aparece son los mejores de toda la película, y demuestran la habilidad del director por presentarlo de manera cruel y rematarlo con una intensa escena final.
Los momentos de suspenso son muchos, son bastantes las escenas en las que se realizan sustos muy inesperados y situaciones en las que los escalofríos y la sorpresa aparece. Esta es una experiencia que toma una velocidad impresionante, que no frena ni se toma el tiempo en contar abundantes explicaciones sobre lo ocurrido, es una travesía en la que predominan las emociones y sensaciones. Al comienzo aparece la incertidumbre y el temor por la persona que el grupo decide recoger del camino; luego aparece la rivalidad entre los amigos, muy bien expresada por el personaje llamado Franklin; después aparece el miedo, la sorpresa y la supervivencia, los cuales se extienden casi hasta el final; y por último la crueldad y esa sensación de locura e incoherencia que Sally siente en la bizarra comida en familia.
La fotografía y la utilización de las cámaras es espectacular, ya que con el uso de los diferentes planos y las intenciones que se marcaron al ser utilizados, por ejemplo el encuadre contrapicado a la figura villana para mostrar su fuerza y poder, o esas tomas en las que predominan los planos detalles de las diferentes partes del cuerpo de las víctimas o del asesino, aportan una belleza y rusticidad visual que acompaña muy bien el desarrollo de la historia y la intensifican. El sonido es, al mismo tiempo, muy bueno. El uso de la simplicidad, ya sea visual o auditiva, predomina en esta cinta y la hacen mucho más valiosa y disfrutable, ya que las escenas no están repletas de cortes o movimientos bruscos de cámara.
"The Texas Chainsaw Massacre" es una historia de muerte, de una serie de asesinos en los que predominan la locura y la aberración humana, de desesperación y de supervivencia. Una película muy bien lograda desde lo visual, en la que no hay más sangre que la que se va chorreando por el delantal del asesino o del rostro de algunos personajes y en la que el suspenso no se centra en mostrar cómo se mata a una persona, sino en los sentimientos y sensaciones que ellas van sintiendo en su último día de vida. Bizarra, intensa, que asusta, sorpresiva y muy bien dirigida, un clásico inconfundible del género.
UNA ESCENA A DESTACAR: la corrida por el lugar de noche
Un grupo de cinco personas deciden dirigirse hacia la casa abandonada de la familia en un pueblo desértico en Texas. Cuando llegan se van a encontrar con que ellos no están solos y que un maniático los está esperando para despedazarlos.
La historia se introduce con unas frases escritas y narradas por una voz en off que dan a entender que lo que se verá a continuación fue basado en una historia verídica, cuestión que por supuesto intensifica el disfrute y convierte al relato en una misteriosa travesía por la mente humana y sus crueles intenciones. Pero, esto no es lo que en realidad funciona como principal fuente de temor o de verosimilitud en la historia, sino la manera en la que se decidió llevar adelante cada una de las escenas. La narración está contada en forma de documental, dando fechas, nombres, lugares y testimonios de periodistas que supuestamente formaron parte de esos hechos reales, y es aquí donde la película triunfa, ya que en su conjunto lo real que minuto a minuto el film se va transformando es asombroso y escalofriante.
El villano, que hasta cierto punto hay una intención por presentarlo solo, abandonado y con una necesidad de matar pese a cual fuera la víctima, el famoso "Leatherface", está introducido de manera muy sorpresiva y rápida, asesinando desde su primer aparición hasta ese inconcluso final. Viste de camisa blanca arremangada, de aspecto vieja, rota y sucia, acompañada de una corbata oscura que con el paso del tiempo se fue manchando y endureciendo a causa de las sucesivas muertes. Por encima tiene un delantal color piel, en el que se pueden apreciar algunas manchas de sangre desparramadas, marca de su crueldad y violencia; es corpulento, fuerte e intimidante. Sus movimientos son bruscos, intensos y hará todo lo posible por alcanzar, despedazar y finalizar a su presa. Como arma utiliza una maza, con la que mata a las víctimas más indefensas y "fáciles", mientras que utiliza una motosierra para desmembrar a las intrépidas presas que salen corriendo en busca de la libertad. Esta es su marca personal, con ella troza a su víctimas y las guarda dentro de un refrigerador, con el propósito de que en un futuro pueda satisfacer el hambre y la soledad. Su rostro está cubierto por unas máscaras, realizadas con el cuero de las personas asesinadas, que va cambiando con el paso del tiempo. Sin duda alguna, cada uno de los momentos en los que este personaje aparece son los mejores de toda la película, y demuestran la habilidad del director por presentarlo de manera cruel y rematarlo con una intensa escena final.
Los momentos de suspenso son muchos, son bastantes las escenas en las que se realizan sustos muy inesperados y situaciones en las que los escalofríos y la sorpresa aparece. Esta es una experiencia que toma una velocidad impresionante, que no frena ni se toma el tiempo en contar abundantes explicaciones sobre lo ocurrido, es una travesía en la que predominan las emociones y sensaciones. Al comienzo aparece la incertidumbre y el temor por la persona que el grupo decide recoger del camino; luego aparece la rivalidad entre los amigos, muy bien expresada por el personaje llamado Franklin; después aparece el miedo, la sorpresa y la supervivencia, los cuales se extienden casi hasta el final; y por último la crueldad y esa sensación de locura e incoherencia que Sally siente en la bizarra comida en familia.
La fotografía y la utilización de las cámaras es espectacular, ya que con el uso de los diferentes planos y las intenciones que se marcaron al ser utilizados, por ejemplo el encuadre contrapicado a la figura villana para mostrar su fuerza y poder, o esas tomas en las que predominan los planos detalles de las diferentes partes del cuerpo de las víctimas o del asesino, aportan una belleza y rusticidad visual que acompaña muy bien el desarrollo de la historia y la intensifican. El sonido es, al mismo tiempo, muy bueno. El uso de la simplicidad, ya sea visual o auditiva, predomina en esta cinta y la hacen mucho más valiosa y disfrutable, ya que las escenas no están repletas de cortes o movimientos bruscos de cámara.
"The Texas Chainsaw Massacre" es una historia de muerte, de una serie de asesinos en los que predominan la locura y la aberración humana, de desesperación y de supervivencia. Una película muy bien lograda desde lo visual, en la que no hay más sangre que la que se va chorreando por el delantal del asesino o del rostro de algunos personajes y en la que el suspenso no se centra en mostrar cómo se mata a una persona, sino en los sentimientos y sensaciones que ellas van sintiendo en su último día de vida. Bizarra, intensa, que asusta, sorpresiva y muy bien dirigida, un clásico inconfundible del género.
UNA ESCENA A DESTACAR: la corrida por el lugar de noche
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