EL SONIDO EN EL CINE
En su segundo largometraje, Peter Strickland propone algo muy interesante: es indudablemente un tributo al cine de horror italiano, más precisamente a Dario Argento, y a la importancia que el sonido tiene en la elaboración de una película, pero más allá de esto, es una propuesta muy atrapante e incierta, surrealista y muy oscura, que introduce más preguntas que respuestas y que está dispuesta a hacer trabajar el cerebro del espectador.
Gilderoy es un técnico ingles que viaja a Italia para ayudar en la edición de sonido de una película de terror. Allí nadie parece tener ganas de hacer amigos, y él, tímido y algo temeroso por hacer las cosas mal, empieza a comprender para qué está allí, y cuál es su verdadero rol en ese film.
Gilderoy es un técnico ingles que viaja a Italia para ayudar en la edición de sonido de una película de terror. Allí nadie parece tener ganas de hacer amigos, y él, tímido y algo temeroso por hacer las cosas mal, empieza a comprender para qué está allí, y cuál es su verdadero rol en ese film.
La cinta empieza de manera lineal, presentando al protagonista, a su nuevo trabajo, a su conflicto con el dinero no cobrado y a cada uno de sus compañeros. Luego de una introducción que le rinde homenaje puramente al cine de terror italiano, el relato empieza a desarrollar una historia que tiene algunos secretos, pero que suponemos que pronto van a revelarse, cosa que nunca sucede. Grabaciones de voces, de ruidos y de distintas atmósferas van dándole el clima perfecto a esta narración para su desarrollo y para que en cierto momento todo se transforme en una nueva película. El argumento desaparece y, mientras todo se va tornando más oscuro, las ideas surrealistas van apareciendo y confundiendo. Hay muchas cosas del cine de David Lynch, muchas escenas que aparentan algo y que quedan a la libre interpretación; segundos que ponen en cuestionamiento todo el metraje; y frases que funcionan a la perfección para complicar aún más su entendimiento. Esta no es una cinta fácil de mirar, porque deja muchos interrogantes sin respuesta y porque todo se resuelve de una manera muy tranquila, pero a la vez caótica.
Este film habla sobre el cine, sobre el arte de hacer películas, sobre las tradicionales técnicas de sonido, y también, sobre cómo la vida misma es una gran cinta de suspenso. El trabajo artístico de este reato es excelente, la fotografía, el ya nombrado sonido, y la edición, todo cierra a la perfección.
Toby Jones vuelve a sorprender en un papel complicado, pero muy bien logrado. Su mirada y sus movimientos son hipnotizantes. Uno siente esa desesperación y locura que va invadiendo su cuerpo en los minutos finales y, como para él, son sentimientos que no se logran entender en su totalidad. Gran protagónico.
Este film habla sobre el cine, sobre el arte de hacer películas, sobre las tradicionales técnicas de sonido, y también, sobre cómo la vida misma es una gran cinta de suspenso. El trabajo artístico de este reato es excelente, la fotografía, el ya nombrado sonido, y la edición, todo cierra a la perfección.
Toby Jones vuelve a sorprender en un papel complicado, pero muy bien logrado. Su mirada y sus movimientos son hipnotizantes. Uno siente esa desesperación y locura que va invadiendo su cuerpo en los minutos finales y, como para él, son sentimientos que no se logran entender en su totalidad. Gran protagónico.
"Berberian Sound Studio" es una película distinta, que empieza de una manera (con un relato lineal y tradicional), pero que termina expresando una ambigüedad muy interesante. Una propuesta muy bien actuada. Un inteligente homenaje al cine de terror italiano.
8/10 MUY BUENA
