THE DESCENDANTS

TITULO ORIGINAL: The Descendants (Los Descendientes)
ORIGEN: Estados Unidos (2011)
DIRECTOR: Alexander Payne
INTERPRETES: George Clooney, Shailene Woodley, Judy Greer, Beau Bridges, Matthew Lillard, Robert Forster

FOTOGRAFIA: Phedon Papamichael

GUION: Alexander Payne, Nat Faxon, Jim Rash
GENERO: Comedia, Drama
DURACION: 115 Minutos
PRODUCTORA: Ad Hominem Enterprises

CRITICA:

MI FAMILIA

Por Martín Morales

Luego de realizar "Entre Copas", cinta del 2004 que ganó el premio Oscar al Mejor Guión Adaptado, Alexander Payne vuelve a ocupar la silla de director para llevar adelante la adaptación cinematográfica de "Los Descendientes", novela escrita por Kaui Hart Hemmings y, teniendo en cuenta el estilo que él mismo marcó en sus pasadas propuestas, le brinda al espectador una experiencia divertida, fuerte, emocionante, con actuaciones maravillosas y un manejo de los tiempos que transporta inmediatamente al público a la acción.

La esposa de Matt King, un importante abogado, ha sufrido un terrible accidente y se encuentra en coma. Él, inseguro por cómo reaccionar a la situación, entiende que tiene que estar lo más cerca posible de sus hijas. Una de ellas es una niña que está muy aferrada a los sentimientos de la madre, mientras que la otra, una adolescente de 17 años, está tratando de encontrarle sentido a la vida y está continuamente en conflicto con su padre y con todos los que no le siguen el juego. Es momento de afianzar las relaciones y de hacerles entender que si están juntos van a poder superar la peor de las noticias.

Aquí Alexander Payne crea una narración que posee una homogeneidad maravillosa, son muchos los toques sutiles y directos de comedia que el director le aportó a la historia, y son varias las escenas en las que se manejan climas dramáticos y emocionantes. Todo llevado adelante con una fluidez atrapante y con la calidad que lo caracteriza. El relato comienza planteando el primer conflicto: la salud de la esposa de Matt, punto de partida para la introducción de varios personajes secundarios (las dos hijas y un insoportable amigo de la más grande) y para comenzar a plantear y a resolver los problemas de la relación entre el padre y las jóvenes. Luego, aparece un segundo conflicto: la situación amorosa del protagonista, el principal eje narrativo por el cual la historia gira a partir de ese momento. Sin dejar de lado el humor, la cinta va introduciendo momentos dramáticos muy bien logrados y una tranquilidad temporal y actoral que sorprende. A su vez, se elabora una descripción muy detallista de cada sentimiento y personalidad, que le brinda disfrute e inteligencia a la propuesta. Una cinta redonda, muy bien dirigida y perfectamente escrita.

Las actuaciones son excelentes. George Clooney vuelve a sorprender, aquí con un personaje reinado por la inseguridad y la incertidumbre del futuro: un hombre que ama a sus hijas, pero que le cuesta mucho entablar comunicación con ellas. Un trabajo impecable de interpretación, no solo corporal (esa manera de correr y de moverse), sino también emocional y actitudinal (los momentos dramáticos están perfectos). Una actuación divertida cuando el relato lo precisa, y sentimentalmente profunda cuando es necesario. El papel de Shailene Woodley, la hija mayor, comienza como una chica rebelde, pero poco a poco se va inspeccionando muy detalladamente su sentir y, gracias a la elaboración detallada y sencilla del retrato de su personaje, la actriz brilla en cada una de sus apariciones, ya sea en los momentos conflictivos (las discusiones con su padre) o en las situaciones más distendidas (la búsqueda de Brian). Amara Miller y Nick Krause (Scottie y Sid) están muy correctos en sus dos importantes papeles. Un elenco que se luce.

La fotografía acompaña el relato de manera muy simple y con algunos toques de originalidad muy buenos; se aprovechan mucho las diferentes locaciones para representar la acción y para darle una belleza visual muy interesante a la historia, como las playas, las habitaciones de las casas o esos planos generales a los paisajes; la banda sonora funciona en la creación de climas dramáticos y de entretenimiento, además de ubicar geográficamente a la narración (las tonadas caribeñas de las playas de Hawaii no podían faltar); y el guión, respetando el material original, relata de manera inteligente, con humor y tranquilidad la dura y verosímil historia aquí contada.

"The Descendants" es una cinta en la que cada una de las partes forman un todo realmente maravilloso. Una propuesta redonda, con excelentes actuaciones, con escenas sencillas y cautivantes (el plano final), con un impecable trabajo de escritura y con un manejo de los tiempos preciso y atrapante. Una película que vuelve a demostrar el talento de Alexander Payne como director y la versatilidad de George Clooney cmo intérprete. Divertida y emocionante. Imperdible.

ESCENA DESTACADA: encuentro con Brian y la secuencia en la pileta con Alex.