TITULO ORIGINAL: Toy Story 3ORIGEN: Estados Unidos.
INTERPRETES: Tom Hanks, Tim Allen, Don Rickles, Jim Varney, Wallace Shawn, John Ratzenberger, Annie Potts, John Morris, Joan Cusack
DIRECTOR: Lee Unkrich
GUION: Michael Arndt
MÚSICA: Randy Newman
GENERO: Animación.
DURACION: 107 Minutos
CALIFICACION: Apta para todo público.
DISTRIBUIDORA: Disney
MI OPINION:
10 EXCELENTE
CRITICA:
ARTE QUE VIAJA AL INFINITO Y MAS ALLA
Por Martín Morales
Por Martín Morales
Luego de 11 años del estreno de "Toy Story 2", Pixar decidió darle un acento final a la historia de Andy y sus amigos de plástico de la manera más ambiciosa posible, pero sin dejar de lado la esencia de la saga, de sus personajes, del entretenimiento y del mensaje, convirtiendo así a esta serie de película en una de las mejores trilogías de la historia del cine.
Andy tiene 17 años y está a punto de irse a la universidad para comenzar una nueva etapa en su vida. Sus amigos de la infancia, Woody, Jessie, Buzz y sus compañeros van a encontrarse en un grave problema cuando de repente son enviados a una guardería y maltratados por un grupo de niños y por otros juguetes que dominan el lugar. Ellos van a tener que escapar y volver a su hogar.
El guión es una pieza literaria pocas veces vista en el cine, se mezcla la acción, el romance, el suspenso, el terror, el drama y la emoción de una manera increíble y muy homogénea, sin entrar en el forcejeo de emociones ni en los golpes bajos intencionales. La cinta da comienzo con lo que es una de las mejores introducciones que se han elaborado en la historia del cine de animación y acción, la cual forma parte de la imaginación del pequeño Andy y donde cada uno de los personajes desarrolla la identidad ficticia que desea. Unos pocos pero largos minutos que homenajean a diferentes películas del género y que sirven como comienzo para lo que verdaderamente está por suceder.
A partir de allí comienza a desarrollarse la narración y los personajes que ya hemos disfrutado en las dos películas anteriores, van apareciendo y haciendo de las suyas. Los movimientos de Woody siguen siendo sorprendentes, ya que gracias a la voz aportada por Tom Hanks, que mezcla la rudeza con la inseguridad y el valor por hacer todo lo posible por sus amigos, esos saltos y difícil manejo de las extremidades aportan un lujo visual increíble y un punto que enriquece el humor indirecto de la película. Buzz mentiene todos sus aspectos físicos y morales, Tim Allen brinda un trabajo sorprendente encarnándolo. Este protagoniza muchos momentos muy divertidos, ya sea cada una de las escenas de acción o ese cambio de idioma que maravilla los sentidos y expresa una originalidad espectacular por parte de Pixar. Jessie tiene una importancia mayor, que como en la segunda parte Joan Cusack está impecable; Hamm, el Sr y la Sra cara de Papa sorprenden con su humor irónico y desconfianza, hay una escena protagonizada por el Sr que involucra una tortilla que es magnifica; los marcianitos de la pizzería, que parecen sorprenderse a cada momento prununciando un emocionante: "¡¡Ohhhhh!!"; Rex mantiene su miedo y continua intromisión en los diálogos, con un trabajo por parte de Wallace Shawn muy bueno.
Pero, y quizá uno de los grandes aciertos de esta entrega, se introducen nuevos personajes que complementan la narración y que cada uno expresa una necesidad espontánea de explicación para que la historia se entienda y se disfrute al máximo. Es así como Lotso, interpretado por Ned Beatty, un oso de peluche que huele a frutillas, se convierte en el principal villano de la cinta y mantiene hasta el final su identidad, muy bien desarrollado y rematado. Ken, el novio de Barbie y de quien continuamente se hacen referencias sobre su sexualidad, es la gran revelación, tiene escenas verdaderametne delirantes (cambios de ropa). Big Baby, un bebé muy tierno de día, pero un diabólico ser por las noches, está genial; el teléfono, que protagoniza una escena de suspenso increíble y un mono, una de las tantas sorpresas de la película, que asusta y maravilla a la vez.
Visualmente esta tercera pare es bellísima, los colores utilizados mantienen un nivel de respeto respecto a las películas anteriores. Los efectos visuales mejoraron mucho, y cada uno de los escenarios utilizados fueron representados con total detalle y expresión, solo vale mirar con detenimiento la escena del horno, un despliegue visual y emotivo sorprendente. Esta es la película más oscura de la productora, hay escenas en las que no se puede predecir el futuro de los personajes, donde el miedo y el suspenso aparecen tal como si se estuviese viendo un thriller.
Pero, y definitivamente el condimento que alza a las nuves a la película, tal como Carl lo hizo en otra de las producciones de Pixar, es el mensaje. "Toy Story" fue un relato sobre la amistad; "Toy Story 2" sobre la aceptación y la perseverancia, "Toy Story 3" es la historia que cierra este circulo, un relato sobre el destino, el compañerismo, la familia y el amor. Es inevitable derramar una lágrima al final, es casi imposible no sentirse identificado con Andy y con Woody, todos pasamos por ese momento en el que tuvimos que desprendernos de las cosas que más amábamos y que nunca hubiésemos querido que se vayan, es dificil no emocionarse con el ejemplo de amistad que se desarrolla entre los juguetes. Hay películas en las que el sentimiento se genera por lástima, dolor o diversión, aquí uno se ve a sí mismo en el rol protagónico y siente lo que él está sintiendo. Un relato que hace viajar al espectador a su infancia, a revivir esos grandes momentos compartidos con una pelota, un muñeco, una mamá y un amigo de verdad. Una maravilla que solo Pixar desarrolla con total soltura, respeto y amor.
"Toy Story 3" es sencillamente una experiencia cinematográfica pocas veces vista en pantalla grande. Una cinta excelente visual y sonoramente (Randy Newman logra destacarse una vez más), con un trabajo impecable y muy expresivo por parte de los actores que encarnaron las voces de los personajes (vale la pena destacar la labor de Mike Amigorena en el rol de Ken en la versión latinoamericana). Los finales de las buenas historias son difíciles de aceptar, y mucho más cuando el espectador se encariña tanto con sus personajes. La perfecta conclusión para, luego de "El Señor de los Anillos", la mejor trilogía creada en la historia del cine.
UNA ESCENA A DESTACAR: introducción y final.
TRAILER:
Andy tiene 17 años y está a punto de irse a la universidad para comenzar una nueva etapa en su vida. Sus amigos de la infancia, Woody, Jessie, Buzz y sus compañeros van a encontrarse en un grave problema cuando de repente son enviados a una guardería y maltratados por un grupo de niños y por otros juguetes que dominan el lugar. Ellos van a tener que escapar y volver a su hogar.
El guión es una pieza literaria pocas veces vista en el cine, se mezcla la acción, el romance, el suspenso, el terror, el drama y la emoción de una manera increíble y muy homogénea, sin entrar en el forcejeo de emociones ni en los golpes bajos intencionales. La cinta da comienzo con lo que es una de las mejores introducciones que se han elaborado en la historia del cine de animación y acción, la cual forma parte de la imaginación del pequeño Andy y donde cada uno de los personajes desarrolla la identidad ficticia que desea. Unos pocos pero largos minutos que homenajean a diferentes películas del género y que sirven como comienzo para lo que verdaderamente está por suceder.
A partir de allí comienza a desarrollarse la narración y los personajes que ya hemos disfrutado en las dos películas anteriores, van apareciendo y haciendo de las suyas. Los movimientos de Woody siguen siendo sorprendentes, ya que gracias a la voz aportada por Tom Hanks, que mezcla la rudeza con la inseguridad y el valor por hacer todo lo posible por sus amigos, esos saltos y difícil manejo de las extremidades aportan un lujo visual increíble y un punto que enriquece el humor indirecto de la película. Buzz mentiene todos sus aspectos físicos y morales, Tim Allen brinda un trabajo sorprendente encarnándolo. Este protagoniza muchos momentos muy divertidos, ya sea cada una de las escenas de acción o ese cambio de idioma que maravilla los sentidos y expresa una originalidad espectacular por parte de Pixar. Jessie tiene una importancia mayor, que como en la segunda parte Joan Cusack está impecable; Hamm, el Sr y la Sra cara de Papa sorprenden con su humor irónico y desconfianza, hay una escena protagonizada por el Sr que involucra una tortilla que es magnifica; los marcianitos de la pizzería, que parecen sorprenderse a cada momento prununciando un emocionante: "¡¡Ohhhhh!!"; Rex mantiene su miedo y continua intromisión en los diálogos, con un trabajo por parte de Wallace Shawn muy bueno.
Pero, y quizá uno de los grandes aciertos de esta entrega, se introducen nuevos personajes que complementan la narración y que cada uno expresa una necesidad espontánea de explicación para que la historia se entienda y se disfrute al máximo. Es así como Lotso, interpretado por Ned Beatty, un oso de peluche que huele a frutillas, se convierte en el principal villano de la cinta y mantiene hasta el final su identidad, muy bien desarrollado y rematado. Ken, el novio de Barbie y de quien continuamente se hacen referencias sobre su sexualidad, es la gran revelación, tiene escenas verdaderametne delirantes (cambios de ropa). Big Baby, un bebé muy tierno de día, pero un diabólico ser por las noches, está genial; el teléfono, que protagoniza una escena de suspenso increíble y un mono, una de las tantas sorpresas de la película, que asusta y maravilla a la vez.
Visualmente esta tercera pare es bellísima, los colores utilizados mantienen un nivel de respeto respecto a las películas anteriores. Los efectos visuales mejoraron mucho, y cada uno de los escenarios utilizados fueron representados con total detalle y expresión, solo vale mirar con detenimiento la escena del horno, un despliegue visual y emotivo sorprendente. Esta es la película más oscura de la productora, hay escenas en las que no se puede predecir el futuro de los personajes, donde el miedo y el suspenso aparecen tal como si se estuviese viendo un thriller.
Pero, y definitivamente el condimento que alza a las nuves a la película, tal como Carl lo hizo en otra de las producciones de Pixar, es el mensaje. "Toy Story" fue un relato sobre la amistad; "Toy Story 2" sobre la aceptación y la perseverancia, "Toy Story 3" es la historia que cierra este circulo, un relato sobre el destino, el compañerismo, la familia y el amor. Es inevitable derramar una lágrima al final, es casi imposible no sentirse identificado con Andy y con Woody, todos pasamos por ese momento en el que tuvimos que desprendernos de las cosas que más amábamos y que nunca hubiésemos querido que se vayan, es dificil no emocionarse con el ejemplo de amistad que se desarrolla entre los juguetes. Hay películas en las que el sentimiento se genera por lástima, dolor o diversión, aquí uno se ve a sí mismo en el rol protagónico y siente lo que él está sintiendo. Un relato que hace viajar al espectador a su infancia, a revivir esos grandes momentos compartidos con una pelota, un muñeco, una mamá y un amigo de verdad. Una maravilla que solo Pixar desarrolla con total soltura, respeto y amor.
"Toy Story 3" es sencillamente una experiencia cinematográfica pocas veces vista en pantalla grande. Una cinta excelente visual y sonoramente (Randy Newman logra destacarse una vez más), con un trabajo impecable y muy expresivo por parte de los actores que encarnaron las voces de los personajes (vale la pena destacar la labor de Mike Amigorena en el rol de Ken en la versión latinoamericana). Los finales de las buenas historias son difíciles de aceptar, y mucho más cuando el espectador se encariña tanto con sus personajes. La perfecta conclusión para, luego de "El Señor de los Anillos", la mejor trilogía creada en la historia del cine.
UNA ESCENA A DESTACAR: introducción y final.
TRAILER:
