TITULO ORIGINAL: The Master (El Maestro)
ORIGEN: Estados Unidos (2012)
DIRECCIÓN: Paul Thomas Anderson
GUIÓN: Paul Thomas Anderson
GUIÓN: Paul Thomas Anderson
INTERPRETES: JJoaquin Phoenix, Philip Seymour Hoffman, Amy Adams, Laura Dern, Kevin J. O'Connor, Rami Malek, Jesse Plemons, Fiona Dourif, David Warshofsky, Lena Endre, Ambyr Childers
FOTOGRAFÍA: Mihai Malaimare Jr.
MÚSICA: Jonny Greenwood
GENERO: Drama
FOTOGRAFÍA: Mihai Malaimare Jr.
MÚSICA: Jonny Greenwood
GENERO: Drama
DURACION: 137 Minutos
PRODUCTORA: The Weinstein Company, Annapurna Pictures, Ghoulardi Film Company
CRITICA:
EL INQUIETANTE UNIVERSO DE PAUL THOMAS ANDERSON
Por Martín Morales
Cada película dirigida por Paul Thomas Anderson es un reto para el espectador, por cómo él dirige a los actores y les saca su máximo potencial, por cómo crea una historia retorcida, profunda y meticulosa sobre las emociones humanas, por cómo se ve acompañado por un grupo técnico impecable que siempre plasma sus intrigantes planos en pantalla, y por cómo no deja indiferente al público luego de verlas. En esta oportunidad, vuelve a brillar con una historia difícil de contar y caótica, llevada adelante con inteligencia, con sorpresa y con la calidad que lo caracteriza.
Freddie Quell es un hombre que quedó algo perturbado por sus vivencias en la marina. Es alcohólico y no posee un trabajo fijo. Un día, luego de escaparse de una plantación, se cuela en un crucero, en el que se estaba por celebrar el matrimonio de la hija de un famoso escritor y creador de una organización religiosa que está tomando cada vez más poder en Estados Unidos. Sus miembros tienen la intensión de ayudar al vagabundo, pero su violenta personalidad es más fuerte y la convivencia pronto se va a ser difícil.
PHOENIX Y SU PARTICULAR PERSONAJE
Paul Thomas Anderson introduce rápidamente la personalidad del protagonista: un hombre con problemas sociales y psicológicos, obsesionado con el sexo y adicto al alcohol, y lo lleva a un espacio totalmente opuesto, para crear un relato sobre las relaciones humanas, sobre la psiquis y la religión. El director crea roles que, apoyados por grandes escenas dramáticas, poseen mucha fuerza y una convicción que marca con definición los caminos por el que el relato va transitando en cada minuto. Muchos diálogos, un despliegue actoral impresionante, y una radiografía sobre el Estados Unidos posguerra dura, realista, profunda y con muchas sorpresas.
Las escenas son hipnóticas, por su imponente uso de las cámaras (el director juega con los planos y con las alucinaciones confundiendo intencionalmente al espectador); por la tranquila, pero a la vez desesperante banda sonora; por los diálogos, los cuales exploran la psicología y el pensar de las personas de esa época; y, en especial, por el fantástico trabajo actoral de cada uno de los intérpretes. Joaquin Phoenix hace una labor que resume toda su carrera, le aporta no solo histrionismo a su rol, sino un realismo que por momentos impresiona. Se encarnó física y emocionalmente en su personaje. Philip Seymour Hoffman vuelve a brillar, aquí en un papel con mucha convicción y decisión, y le brinda una potencia y una autoridad maravillosa a Lancaster Dodd; mientras que Amy Adams se luce, aunque aparece poco, como la esposa (los minutos finales son excelentes).
No es extraño que las películas de Anderson necesiten ser vistas más de una vez para comprender cada una de las cuestiones que se presentan, para entender a los personajes, y para descubrir distintas aristas narrativas. Esta, por supuesto, no es la excepción. El realizador enmascara diversas cuestiones, las esconde, esperando que algún hábil espectador las encuentre, las analice y las comunique. Cine, puro cine, de la mano de un maestro que sabe manejar los tiempos, que enreda con simpleza su historia, y que aporta aquí otra maravilla para desentrañar.
CONCLUSIÓN
"The Master" no es solamente otra película del director de "Petroleo Sangriento", es una de las mejores de su filmografía. Una cinta con soberbias interpretaciones (el trabajo de Phoenix no posee adjetivos calificativos que le den justicia), con una hermosa fotografía, y con un guión complicado, incisivo y para leer. Una de las más intensas y atrapantes experiencias sensoriales de los últimos años.
Freddie Quell es un hombre que quedó algo perturbado por sus vivencias en la marina. Es alcohólico y no posee un trabajo fijo. Un día, luego de escaparse de una plantación, se cuela en un crucero, en el que se estaba por celebrar el matrimonio de la hija de un famoso escritor y creador de una organización religiosa que está tomando cada vez más poder en Estados Unidos. Sus miembros tienen la intensión de ayudar al vagabundo, pero su violenta personalidad es más fuerte y la convivencia pronto se va a ser difícil.
PHOENIX Y SU PARTICULAR PERSONAJE
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Críticas de películas con nominación en actuación Oscars 2013:
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Paul Thomas Anderson introduce rápidamente la personalidad del protagonista: un hombre con problemas sociales y psicológicos, obsesionado con el sexo y adicto al alcohol, y lo lleva a un espacio totalmente opuesto, para crear un relato sobre las relaciones humanas, sobre la psiquis y la religión. El director crea roles que, apoyados por grandes escenas dramáticas, poseen mucha fuerza y una convicción que marca con definición los caminos por el que el relato va transitando en cada minuto. Muchos diálogos, un despliegue actoral impresionante, y una radiografía sobre el Estados Unidos posguerra dura, realista, profunda y con muchas sorpresas.
Las escenas son hipnóticas, por su imponente uso de las cámaras (el director juega con los planos y con las alucinaciones confundiendo intencionalmente al espectador); por la tranquila, pero a la vez desesperante banda sonora; por los diálogos, los cuales exploran la psicología y el pensar de las personas de esa época; y, en especial, por el fantástico trabajo actoral de cada uno de los intérpretes. Joaquin Phoenix hace una labor que resume toda su carrera, le aporta no solo histrionismo a su rol, sino un realismo que por momentos impresiona. Se encarnó física y emocionalmente en su personaje. Philip Seymour Hoffman vuelve a brillar, aquí en un papel con mucha convicción y decisión, y le brinda una potencia y una autoridad maravillosa a Lancaster Dodd; mientras que Amy Adams se luce, aunque aparece poco, como la esposa (los minutos finales son excelentes).
No es extraño que las películas de Anderson necesiten ser vistas más de una vez para comprender cada una de las cuestiones que se presentan, para entender a los personajes, y para descubrir distintas aristas narrativas. Esta, por supuesto, no es la excepción. El realizador enmascara diversas cuestiones, las esconde, esperando que algún hábil espectador las encuentre, las analice y las comunique. Cine, puro cine, de la mano de un maestro que sabe manejar los tiempos, que enreda con simpleza su historia, y que aporta aquí otra maravilla para desentrañar.
CONCLUSIÓN
"The Master" no es solamente otra película del director de "Petroleo Sangriento", es una de las mejores de su filmografía. Una cinta con soberbias interpretaciones (el trabajo de Phoenix no posee adjetivos calificativos que le den justicia), con una hermosa fotografía, y con un guión complicado, incisivo y para leer. Una de las más intensas y atrapantes experiencias sensoriales de los últimos años.
