TITULO ORIGINAL: The Guard (The Guard)
ORIGEN: Irlanda (2011)
DIRECTOR: John Michael McDonagh
INTERPRETES: Brendan Gleeson, Don Cheadle, Liam Cunningham, Michael Og Lane, David Wilmot, Mark Strong
MUSICA: Calexico
FOTOGRAFIA: Larry Smith
GUION: John Michael, McDonagh
GENERO: Comedia
DURACION: 96 Minutos
PRODUCTORA: Reprisal Films, Element Pictures, Crescendo Productions, Aegis Film Fund, Irish Film Board, Prescience, UK Film Council
GUION: John Michael, McDonagh
GENERO: Comedia
DURACION: 96 Minutos
PRODUCTORA: Reprisal Films, Element Pictures, Crescendo Productions, Aegis Film Fund, Irish Film Board, Prescience, UK Film Council
CRITICA:
COMEDIA POLICIAL CON EXCELENTES ACTUACIONES
Por Martín Morales
Está claro que Brendan Gleeson es un gran actor, en especial cuando sus personajes necesitan de un matiz de personalidad que logre fomentar y profundizar su guión, y aquí, acompañado por un elenco que logra lucirse por su imprevisibilidad e histrionismo, por un libreto inteligente y muy divertido, y por una correcta dirección, su interpretación se convierte en una ficha fundamental para el disfrute de esta particular y delirante comedia.
El Sargento Gerry Boyle es un individuo que lleva adelante su trabajo de una manera muy peculiar, alejándose de todas las reglas imaginables, pero manteniendo una línea extraña de coherencia que siempre termina dándole la razón. Un día aparece un hombre asesinado y se descubre que un grupo de narcotraficantes están a punto de entrar al país una cantidad descomunal de droga. Con la ayuda de un agente del FBI él va a intentar desenmascarar a los responsables y, a su manera, terminar con el asunto.
Esta película presenta dos características que la convierten en una experiencia muy divertida e inteligente y que realzan cada una de las situaciones paralelas que se van presentando: por un lado, el guión. Si bien la historia mantiene muchos puntos en común con otras películas del mismo estilo y carece de una invención que logre diferenciar el caso policial de tantos otros, el libreto logra lucirse por la manera en la que cada conflicto, reacción y remate se va presentando. El humor es de suma importancia para la historia y, entrando en terrenos complicados, como la discriminación y el racismo, el mismo con inteligencia logra exponerse de tal manera que desde el comienzo, en todas las escenas dramáticas y hasta el final, aparezca alguna situación delirante y muy bien pensada para entretener al espectador. Una cinta que comparte algunas características con "In Bruges", con una historia que no es del todo emocionante o fuerte, pero que, gracias a la manera en la que todo se va dando, se convierte en una muy disfrutable, respetuosa y original propuesta.
Por otro lado, el trabajo realizado por Brendan Gleeson en el papel protagónico. El Sargento es racista, impulsivo, desinteresado en todo lo que lo rodea y no le afecta, solitario, y, en el fondo, un hombre que se arrepiente del camino que eligió para su vida. Cada una de estas características fueron desarrolladas con excelencia por parte del actor, principalmente en todas las escenas cómicas y en las reacciones que va teniendo a las situaciones que van sucediendo a su alrededor. Una actuación que es el centro principal de la película y el atractivo más importante de la historia. Quienes lo acompañan están muy bien, en especial Don Cheadle en el rol del agente del FBI, el cual funciona a la perfección como el acompañante del protagonista. A su vez, los villanos, Liam Cunningham, Mark Strong y David Wilmot, cada uno con una personalidad diferente y muy acentuada, le aportan un poco de histrionismo y locura a la propuesta.
Por el lado técnico, la banda de sonido acompaña muy bien a la imagen, principalmente en los pocos momentos de acción y en las escenas dramáticas; la fotografía es acertada, juega con los primeros planos y los grandes planos generales a las diferentes locaciones abiertas; mientras que la dirección se destaca en el trabajo realizado con los actores y en la creación de climas.
"The Guard" es una comedia inteligente, muy bien resuelta argumental y humorísticamente, y que representa una de las mejores propuestas del género del 2011. Un film muy bien actuado, con una narración policial repetida en algunas situaciones, pero que cumple con su objetivo y que proporciona una entretenida y muy disfrutable oportunidad para ver a un Brendan Gleeson inspirado.
ESCENA DESTACADA: mañana en el bar.
Está claro que Brendan Gleeson es un gran actor, en especial cuando sus personajes necesitan de un matiz de personalidad que logre fomentar y profundizar su guión, y aquí, acompañado por un elenco que logra lucirse por su imprevisibilidad e histrionismo, por un libreto inteligente y muy divertido, y por una correcta dirección, su interpretación se convierte en una ficha fundamental para el disfrute de esta particular y delirante comedia.El Sargento Gerry Boyle es un individuo que lleva adelante su trabajo de una manera muy peculiar, alejándose de todas las reglas imaginables, pero manteniendo una línea extraña de coherencia que siempre termina dándole la razón. Un día aparece un hombre asesinado y se descubre que un grupo de narcotraficantes están a punto de entrar al país una cantidad descomunal de droga. Con la ayuda de un agente del FBI él va a intentar desenmascarar a los responsables y, a su manera, terminar con el asunto.
Esta película presenta dos características que la convierten en una experiencia muy divertida e inteligente y que realzan cada una de las situaciones paralelas que se van presentando: por un lado, el guión. Si bien la historia mantiene muchos puntos en común con otras películas del mismo estilo y carece de una invención que logre diferenciar el caso policial de tantos otros, el libreto logra lucirse por la manera en la que cada conflicto, reacción y remate se va presentando. El humor es de suma importancia para la historia y, entrando en terrenos complicados, como la discriminación y el racismo, el mismo con inteligencia logra exponerse de tal manera que desde el comienzo, en todas las escenas dramáticas y hasta el final, aparezca alguna situación delirante y muy bien pensada para entretener al espectador. Una cinta que comparte algunas características con "In Bruges", con una historia que no es del todo emocionante o fuerte, pero que, gracias a la manera en la que todo se va dando, se convierte en una muy disfrutable, respetuosa y original propuesta.
Por otro lado, el trabajo realizado por Brendan Gleeson en el papel protagónico. El Sargento es racista, impulsivo, desinteresado en todo lo que lo rodea y no le afecta, solitario, y, en el fondo, un hombre que se arrepiente del camino que eligió para su vida. Cada una de estas características fueron desarrolladas con excelencia por parte del actor, principalmente en todas las escenas cómicas y en las reacciones que va teniendo a las situaciones que van sucediendo a su alrededor. Una actuación que es el centro principal de la película y el atractivo más importante de la historia. Quienes lo acompañan están muy bien, en especial Don Cheadle en el rol del agente del FBI, el cual funciona a la perfección como el acompañante del protagonista. A su vez, los villanos, Liam Cunningham, Mark Strong y David Wilmot, cada uno con una personalidad diferente y muy acentuada, le aportan un poco de histrionismo y locura a la propuesta.
Por el lado técnico, la banda de sonido acompaña muy bien a la imagen, principalmente en los pocos momentos de acción y en las escenas dramáticas; la fotografía es acertada, juega con los primeros planos y los grandes planos generales a las diferentes locaciones abiertas; mientras que la dirección se destaca en el trabajo realizado con los actores y en la creación de climas.
"The Guard" es una comedia inteligente, muy bien resuelta argumental y humorísticamente, y que representa una de las mejores propuestas del género del 2011. Un film muy bien actuado, con una narración policial repetida en algunas situaciones, pero que cumple con su objetivo y que proporciona una entretenida y muy disfrutable oportunidad para ver a un Brendan Gleeson inspirado.
ESCENA DESTACADA: mañana en el bar.
