PREDATOR

TITULO ORIGINAL: Predator (Depredador)
ORIGEN: Estados Unidos (1987)
DIRECTOR: John McTiernan
INTERPRETES: Arnold Schwarzenegger, Carl Weathers, Elpidia Carrillo, Bill Duke, Jesse Ventura, Kevin Peter Hall
FOTOGRAFIA: Donald McAlpine
MUSICA: Alan Silvestri
GUION: Jim Thomas, John Thomas
GENERO: Terror, Ciencia Ficción
DURACION: 107 Minutos
DISTRIBUIDORA: 20th Century Fox
CALIFICACION: Apta para mayores de 16 años

MI OPINION:

6/10 BUENA

CRITICA:

LA SELVA ESTA VIVA
Por Martín Morales

Película de ciencia ficción, con algunos toques de terror y suspenso, que desarrolla una historia sencilla, pero contada de tal manera que el villano presente una construcción de su identidad muy buena, acentuando el misterio y la incógnita sobre su aspecto, pese a que en la segunda mitad cae profundamente en extensiones innecesarias y en vueltas que alargan desmedidamente la duración.

Un grupo de elite, comandado por Dutch, deciden ir a Guatemala a rescatar a un ministro que fue capturado por una fuerza guerrillera en Val Verde. Luego de atacar un pequeño asentamiento y de descubrir la verdadera intensión de la misión, él se va a sentir traicionado por sus superiores y va a intentar escapar del lugar. Pero algo lo retiene y lo obliga a desenmascarar a una fuerza que se encuentra oculta en la selva. Una criatura está suelta y quiere asesinarlos.

La cinta se introduce con una toma muy corta de una nave depositando una carga en la Tierra, y la narración, rápidamente, se dirige hacia la presentación de los personajes y la supuesta misión que tienen que cumplir en Guatemala. Una de las virtudes de esta propuesta es la manera en la que se decidió mostrar gradualmente lo que está sucediendo en verdad. Ese preámbulo que dura apenas unos segundos, y todas las tomas que se pueden apreciar desde los árboles, supuestamente desde el punto de vista de la criatura que se esconde en la selva y acecha a los personajes, le aportan mucho suspenso y una identidad que está muy bien planteada y desarrollada. La película se toma su tiempo para descubrir al villano, y no es hasta los momentos finales cuando el espectador tiene la oportunidad de ver completamente el cuerpo del depredador. Esta es una característica que prevalece a la cinta y que fue manejada de tal manera que la historia no aburra y se mantenga la tensión necesaria en cada momento.

La historia es muy sencilla y son pocas las preguntas que tienen una respuesta, se dejan muchas cosas en el aire y a la libre interpretación del espectador, y se introduce un argumento secundario, con una rehén, que nunca se resuelve. A su vez, la segunda parte de la historia se ve alargada innecesariamente por vueltas poco entretenidas, donde se pone a prueba el nivel actoral de Schwarzenegger y de donde no sale bien parado. Desde el momento en el que su personaje descubre cómo ocultarse de la criatura hasta el mismo final hay casi media hora de idas y vueltas interminables que pudieron haberse resumido en una sola secuencia mucho más directa y fuerte que las aquí presentadas.

Las actuaciones son correctas, en especial porque ninguno de sus intérpretes tiene algún personaje que requiera de una caracterización intensa y que explore diferentes matices. Pero de igual manera están correctos. Arnold Schwarzenegger está muy bien al comienzo, su autoridad y sus liderazgo están bien interpretados, pese a que durante la segunda mitad sus gritos y corridas se vean sobreactuadas y poco sentidas. Quienes lo acompañan lo hacen de manera satisfactoria, y logran destacarse: Carl Weathers, Elpidia Carrillo, Bill Duke y Jesse Ventura.

Los efectos especiales son muy buenos y el diseño físico de la criatura es intimidante y está muy bien logrado desde todos los sentidos. El juego con los diferentes puntos de vista (las tomas desde los árboles) y con las características físicas del depredador (camuflaje y ese momento en el que se saca la máscara) son excelentes.

"Predator" es una película que le sobran algunos minutos, que presenta una historia simple, pero efectiva y bien lograda visual y dramáticamente. Con correctas, pero no del todo lucidas, actuaciones, y con una historia que no tiene el inventivo ni la profundidad de pasadas películas protagonizadas por Arnold Schwarzenegger, pero que cumple con su función y le brinda al espectador una intimidante experiencia. Una correcta película que se convirtió, merecidamente, en un clásico por su villano y no por su historia. Vale la pena recordarla y volver a verla.

UNA ESCENA A DESTACAR: ataque al campamento.